por Carlos Castillo para Manzana Mecánica
Más de un millón de personas en más de cien ciudades en las calles: 84% de ellos no respaldan a ningún partido político y 71% protestan por primera vez; 77% tiene educación superior, 22% son estudiantes y 53% menores de 25 años. Explicar como se relaciona este movimiento con la primavera árabe, occupy, el 15M, etc. se lo dejo a los analistas, pero una de las razones para las protestas me llamó mucho la atención.
“Yo no voy a la copa del mundo“, dice@CarlaDauden en este video. Su vídeo, posteado en el sitio de la FIFA en Brasil por Anonymous, no es contra las molestias que ocasiona la construcción apresurada y a última hora de infraestructura, que crea atascos kilométricos. Su protesta es contra la distancia que hay entre los beneficios que obtendrá, principalmente, la élite que organiza este evento versus los costos que están pagando, principalmente, los brasileños comunes y corrientes hoy por ellos.
Brasil es un país en desarrollo y que necesita más gasto social, las protestas en gran parte son para pedir mejor transporte, mejor salud, y en general una mayor preocupación de la clase política por el bienestar de la clase trabajadora. En cambio, la copa del mundo está generando importantes desplazamientos de gente, violencia contra personas y familias completas, y un agujero de 30 billones de dólares. Aquí el vídeo:
https://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=ZApBgNQgKPU
¿Cómo podemos ayudar desde la tecnología?
Personalmente, al margen de cómo los medios sociales ayudan a organizar estas protestas (ej.: #ChangeBrazil), me gustaría ver cómo los medios sociales pueden ayudar a organizar los resultados de ellas. Tanto Occupy Wall Street en EEUU como el Movimiento 15M en España decidieron desde el comienzo aplastar a cualquier tipo de liderazgo que surgiera. La idea de que la anarquía absoluta es la mejor forma de luchar contra gente organizada, poderosa, inteligente, y con recursos me resulta extremadamente absurda. Entiendo la desconfianza contra las élites, pero desconfiar de todo el mundo tiene un precio:
La cacofonía de voces es problemática para los manifestantes y para los políticos. A menos que encuentren una causa común y la articulen juntos, la energía de las protestas será difícil de mantener, y no se necesitará ninguna respuesta del gobierno. [F.A.]
Podemos crear sistemas como Democracia Líquida u otros que permitan tener mecanismos de decisión sin que existan abusos. El próximo desafío de la gente que produce tecnología para sostener movimientos sociales es crear estas herramientas pare decidir y consensuar. De otra forma, cuando la gente se canse de gritar, se irá de vuelta a su casa y no habrá conseguido nada.
por Carlos Castillo para Manzana Mecánica
Más de un millón de personas en más de cien ciudades en las calles: 84% de ellos no respaldan a ningún partido político y 71% protestan por primera vez; 77% tiene educación superior, 22% son estudiantes y 53% menores de 25 años. Explicar como se relaciona este movimiento con la primavera árabe, occupy, el 15M, etc. se lo dejo a los analistas, pero una de las razones para las protestas me llamó mucho la atención.
“Yo no voy a la copa del mundo“, dice@CarlaDauden en este video. Su vídeo, posteado en el sitio de la FIFA en Brasil por Anonymous, no es contra las molestias que ocasiona la construcción apresurada y a última hora de infraestructura, que crea atascos kilométricos. Su protesta es contra la distancia que hay entre los beneficios que obtendrá, principalmente, la élite que organiza este evento versus los costos que están pagando, principalmente, los brasileños comunes y corrientes hoy por ellos.
Brasil es un país en desarrollo y que necesita más gasto social, las protestas en gran parte son para pedir mejor transporte, mejor salud, y en general una mayor preocupación de la clase política por el bienestar de la clase trabajadora. En cambio, la copa del mundo está generando importantes desplazamientos de gente, violencia contra personas y familias completas, y un agujero de 30 billones de dólares. Aquí el vídeo:
https://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=ZApBgNQgKPU
¿Cómo podemos ayudar desde la tecnología?
Personalmente, al margen de cómo los medios sociales ayudan a organizar estas protestas (ej.: #ChangeBrazil), me gustaría ver cómo los medios sociales pueden ayudar a organizar los resultados de ellas. Tanto Occupy Wall Street en EEUU como el Movimiento 15M en España decidieron desde el comienzo aplastar a cualquier tipo de liderazgo que surgiera. La idea de que la anarquía absoluta es la mejor forma de luchar contra gente organizada, poderosa, inteligente, y con recursos me resulta extremadamente absurda. Entiendo la desconfianza contra las élites, pero desconfiar de todo el mundo tiene un precio:
Podemos crear sistemas como Democracia Líquida u otros que permitan tener mecanismos de decisión sin que existan abusos. El próximo desafío de la gente que produce tecnología para sostener movimientos sociales es crear estas herramientas pare decidir y consensuar. De otra forma, cuando la gente se canse de gritar, se irá de vuelta a su casa y no habrá conseguido nada.
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