![Uno de cada tres ciudadanos europeos acepta el uso del P2P para acceder a ciertos contenidos]()
Puede que la popularidad de las descargas P2P esté en remisión desde que existen servicios como Spotify o Netflix, pero siguen siendo un motivo de preocupación para los creadores de contenido y las autoridades competentes de todo el mundo.
Sin embargo y según un estudio, publicado por la Oficina para la Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO), el 31% de los encuestados en este ensayo aceptarían el uso del P2P si no encuentran alternativas de pago para encontrar ciertos contenidos, frente a un 83% de participantes que preferirían consumir contenido siempre a través de modelos de suscripción.
Este informe es el resultado de entrevistar a 26.500 personas con edades comprendidas a partir de los quince años. La escena que dibuja para creadores de contenido y distribuidores es bastante positiva, ya que de los encuestados el 97% cree que los creadores deben poder proteger sus derechos y ser retribuidos como cualquier profesional.
Las plataformas bajo demanda cuentan con gran aceptación
De todo el total de usuarios encuestados, hay un porcentaje de usuarios que usan o han usado en algún momento las redes P2P de forma deliberada y casi exclusiva. De este total, el 71% de los participantes dijeron que dejaron de utilizar estas vías al existir una alternativa de pago asequible.
Algo de verdad hay en estas palabras, ya lo hemos comentado. En el estudio se refleja de la siguiente manera:
La disponibilidad de contenido asequible desde ofertas de pago como principal razón para dejar las descargas se cita por los encuestados en las siguientes categorías: participantes ente 25 y 39 años (74%), en situación de empleo (76%), que viven en grandes ciudades (75%) y con estudios superiores (72%), lo que está en la línea del perfil de usuario de Internet típico.
De todos los encuestados, al menos un 30% cree que una mejor información les puede ayudar a permanecer lejos de fuentes ilegales, mientras que un 5% dijeron que el P2P nunca desaparecería, sin importar lo que se haga. Y algo de razón no se puede negar que tienen.
A pesar de que las plataformas bajo demanda cuentan con una gran aceptación y muchos usuarios quieren “hacer lo correcto”, parece haber cierta confusión a la hora de diferenciar lo legal y lo ilegal. Casi un 25% de los encuestados dijeron haberse cuestionado si un servicio era legal.
Con estos datos en la mesa, existe una percepción entre los participantes según la cual los servicios bajo demanda ofrecen un mejor producto. Al comparar la calidad de los contenidos en plataformas de pago y P2P, casi el 70% de los encuestados dijeron que servicios como Netflix son un ejemplo de trabajo bien hecho.
En lo que se refiere a diversidad de contenido, los datos no son tan boyantes: sólo un 56% de los participantes cree que los servicios legales hacen un mejor trabajo. Es fácil comprender por qué se da esta respuesta tan tibia, y es que los servicios bajo demanda deben llegar a acuerdos de derechos para lograr emitir según y qué contenidos, mientras que en el P2P no hay derechos que valgan. En cualquier web conocida por todos se puede acceder a cualquier tipo de material sin restricciones.
En general, los resultados del estudio muestran que los ciudadanos europeos respetan la propiedad intelectual, aunque “siempre hay margen para la mejora” según el estudio.
Más información | EUROPEAN CITIZENS AND INTELLECTUAL PROPERTY: PERCEPTION, AWARENESS, AND BEHAVIOUR
Puede que la popularidad de las descargas P2P esté en remisión desde que existen servicios como Spotify o Netflix, pero siguen siendo un motivo de preocupación para los creadores de contenido y las autoridades competentes de todo el mundo.
Sin embargo y según un estudio, publicado por la Oficina para la Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO), el 31% de los encuestados en este ensayo aceptarían el uso del P2P si no encuentran alternativas de pago para encontrar ciertos contenidos, frente a un 83% de participantes que preferirían consumir contenido siempre a través de modelos de suscripción.
Este informe es el resultado de entrevistar a 26.500 personas con edades comprendidas a partir de los quince años. La escena que dibuja para creadores de contenido y distribuidores es bastante positiva, ya que de los encuestados el 97% cree que los creadores deben poder proteger sus derechos y ser retribuidos como cualquier profesional.
Las plataformas bajo demanda cuentan con gran aceptación
De todo el total de usuarios encuestados, hay un porcentaje de usuarios que usan o han usado en algún momento las redes P2P de forma deliberada y casi exclusiva. De este total, el 71% de los participantes dijeron que dejaron de utilizar estas vías al existir una alternativa de pago asequible.
Algo de verdad hay en estas palabras, ya lo hemos comentado. En el estudio se refleja de la siguiente manera:
De todos los encuestados, al menos un 30% cree que una mejor información les puede ayudar a permanecer lejos de fuentes ilegales, mientras que un 5% dijeron que el P2P nunca desaparecería, sin importar lo que se haga. Y algo de razón no se puede negar que tienen.
A pesar de que las plataformas bajo demanda cuentan con una gran aceptación y muchos usuarios quieren “hacer lo correcto”, parece haber cierta confusión a la hora de diferenciar lo legal y lo ilegal. Casi un 25% de los encuestados dijeron haberse cuestionado si un servicio era legal.
Con estos datos en la mesa, existe una percepción entre los participantes según la cual los servicios bajo demanda ofrecen un mejor producto. Al comparar la calidad de los contenidos en plataformas de pago y P2P, casi el 70% de los encuestados dijeron que servicios como Netflix son un ejemplo de trabajo bien hecho.
En lo que se refiere a diversidad de contenido, los datos no son tan boyantes: sólo un 56% de los participantes cree que los servicios legales hacen un mejor trabajo. Es fácil comprender por qué se da esta respuesta tan tibia, y es que los servicios bajo demanda deben llegar a acuerdos de derechos para lograr emitir según y qué contenidos, mientras que en el P2P no hay derechos que valgan. En cualquier web conocida por todos se puede acceder a cualquier tipo de material sin restricciones.
En general, los resultados del estudio muestran que los ciudadanos europeos respetan la propiedad intelectual, aunque “siempre hay margen para la mejora” según el estudio.
Más información | EUROPEAN CITIZENS AND INTELLECTUAL PROPERTY: PERCEPTION, AWARENESS, AND BEHAVIOUR
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