El servicio de correo electrónico antiespionaje se planea lanzar en la segunda mitad de 2014 y funcionará con un sistema criptográfico para resguardar la privacidad de los usuarios. Este mecanismo de criptografía impide que el mensaje sea vulnerado. Además, los servidores del nuevo servicio de correo se instalarán en territorio brasileño, lo que da garantías de seguridad.
“Es preciso conseguir un servicio de correo electrónico más seguro”, manifestó el ministro.
Aunque el nuevo sistema procura mejorar la seguridad de los internautas, su eficacia dependería de la “calidad” del servicio que cree el Estado, reconoció el ministro en una entrevista concedida al diario brasileño ‘Folha de São Paulo’.
Tras obtener pruebas de que la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense (NSA, por sus siglas en inglés) espió el contenido de las llamadas telefónicas, correos electrónicos y mensajes de texto de la presidenta del país, Dilma Rousseff, y de varios de sus principales asesores, se decidió crear este proyecto de e-mail antiespionaje a cargo del Servicio Estatal de Correos de Brasil.
Las pruebas fueron obtenidas gracias a los documentos filtrados por el exfuncionario de la CIA Edward Snowden, que permitieron descubrir que Washington vigilaba el tráfico de Internet en Brasil y otros países de América Latina.
El servicio de correo electrónico antiespionaje se planea lanzar en la segunda mitad de 2014 y funcionará con un sistema criptográfico para resguardar la privacidad de los usuarios. Este mecanismo de criptografía impide que el mensaje sea vulnerado. Además, los servidores del nuevo servicio de correo se instalarán en territorio brasileño, lo que da garantías de seguridad.
“Es preciso conseguir un servicio de correo electrónico más seguro”, manifestó el ministro.
Aunque el nuevo sistema procura mejorar la seguridad de los internautas, su eficacia dependería de la “calidad” del servicio que cree el Estado, reconoció el ministro en una entrevista concedida al diario brasileño ‘Folha de São Paulo’.
Tras obtener pruebas de que la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense (NSA, por sus siglas en inglés) espió el contenido de las llamadas telefónicas, correos electrónicos y mensajes de texto de la presidenta del país, Dilma Rousseff, y de varios de sus principales asesores, se decidió crear este proyecto de e-mail antiespionaje a cargo del Servicio Estatal de Correos de Brasil.
Las pruebas fueron obtenidas gracias a los documentos filtrados por el exfuncionario de la CIA Edward Snowden, que permitieron descubrir que Washington vigilaba el tráfico de Internet en Brasil y otros países de América Latina.
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