Monsanto ha elaborado nuevas variaciones de las plantas de algodón y la soja para tolerar el tratamiento con herbicidascon el fin de ayudar a los cultivadores a luchar contra la maleza. Los portavoces de la compañía aseguran que los herbicidas permiten a los agricultores controlar el crecimiento de los brotes de hierbajo, informa la revista ‘Wired’.
Aunque la empresa afirma que el invento ha pasado una serie de pruebas y las plantas quedan protegidas contra la maleza, Bill Freese, uno de los analistas del Center for Food Safety, sostiene que la aprobación para el uso de estas biotecnologías demuestra la dependencia de la agricultura del aumento de pesticidas en los cultivos.
Diversos expertos opinan que todos los herbicidas que se utilizan en la agricultura no solucionan el problema de las malas hierbas, sino contribuyen a que esta desarrolle resistencia hacia ellos. Además los productos fitosanitarios pueden causar la erosión del suelo.
“Al parecer los agricultores de EE.UU. son adictos al uso de herbicidas a la hora de controlar el crecimiento del hierbajo. Sin embargo dejarán esa costumbre después de los tremendos daños provocados por esas sustancias“, opina Stephen Powles, especialista de la Universidad de Australia Occidental.
La última novedad de la empresa Monsanto podría causar mucho daño a las cosechas en vez de favorecerlas, opinan algunos expertos. Nuevas biotecnologías destinadas a apoyar la lucha de cultivadores con la maleza amenazan con contribuir a las mutaciones y el desarrollo de la resistencia de este mal.
Monsanto ha elaborado nuevas variaciones de las plantas de algodón y la soja para tolerar el tratamiento con herbicidascon el fin de ayudar a los cultivadores a luchar contra la maleza. Los portavoces de la compañía aseguran que los herbicidas permiten a los agricultores controlar el crecimiento de los brotes de hierbajo, informa la revista ‘Wired’.
Aunque la empresa afirma que el invento ha pasado una serie de pruebas y las plantas quedan protegidas contra la maleza, Bill Freese, uno de los analistas del Center for Food Safety, sostiene que la aprobación para el uso de estas biotecnologías demuestra la dependencia de la agricultura del aumento de pesticidas en los cultivos.
Diversos expertos opinan que todos los herbicidas que se utilizan en la agricultura no solucionan el problema de las malas hierbas, sino contribuyen a que esta desarrolle resistencia hacia ellos. Además los productos fitosanitarios pueden causar la erosión del suelo.
“Al parecer los agricultores de EE.UU. son adictos al uso de herbicidas a la hora de controlar el crecimiento del hierbajo. Sin embargo dejarán esa costumbre después de los tremendos daños provocados por esas sustancias“, opina Stephen Powles, especialista de la Universidad de Australia Occidental.
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