Por G. Cerda
El impacto que pueden tener las normas de propiedad intelectual en el acceso de medicamentos mantiene en alerta a la sociedad civil y en particular, a Médicos Sin Frontera (MSF). Para la coordinadora de la Campaña de Acceso a Medicamentos Esenciales de MSF en EEUU, Judit Rius, “la preocupación se enfoca en el impacto que las normas de propiedad intelectual tienen en el acceso de medicamentos, en el precio y en el proceso de innovación para futuros medicamentos que necesitamos en nuestras operaciones y que los ministerios de salud con los que trabajamos necesitan”.
Tal como explica, se está siguiendo de cerca la negociación del TPP desde hace dos años. “No tenemos una posición sobre el acuerdo per se, lo que tenemos es una posición muy técnica en el texto que fue filtrado hace un par de años en el capítulo de propiedad intelectual que EEUU está proponiendo en esta negociación y en ese momento cuando vimos las demandas que EEUU tenía en el TPP, analizamos el texto e hicimos un documento”, explica. Agrega que “siete de las provisiones que EEUU quiere en esta materia puede tener un efecto negativo para la salud pública y lo que estamos pidiendo a los países que están negociando, incluido Chile es que protejan la salud pública en la negociación y retiren o rechacen como mínimo las demás de los EEUU que creemos van a tener un impacto negativo en la salud pública”.
Lo que plantea MSF es que se negocie un acuerdo que priorice las necesidades de salud de los pacientes, pero también de las organizaciones no gubernamentales y de los ministerios de salud que normalmente responde a las necesidades de la población. “Tenemos también preocupaciones con algunas secciones del capítulo de inversiones, específicamente en la relación del capítulo de inversiones con propiedad intelectual y después el tercer capítulo de precios y regulaciones farmacéuticas, creemos que se les está solicitando a los países miembros que básicamente limiten su capacidad de regulación de control de precios. Creemos que eso tendrá consecuencias negativas”, concluye.
Por G. Cerda
El impacto que pueden tener las normas de propiedad intelectual en el acceso de medicamentos mantiene en alerta a la sociedad civil y en particular, a Médicos Sin Frontera (MSF). Para la coordinadora de la Campaña de Acceso a Medicamentos Esenciales de MSF en EEUU, Judit Rius, “la preocupación se enfoca en el impacto que las normas de propiedad intelectual tienen en el acceso de medicamentos, en el precio y en el proceso de innovación para futuros medicamentos que necesitamos en nuestras operaciones y que los ministerios de salud con los que trabajamos necesitan”.
Tal como explica, se está siguiendo de cerca la negociación del TPP desde hace dos años. “No tenemos una posición sobre el acuerdo per se, lo que tenemos es una posición muy técnica en el texto que fue filtrado hace un par de años en el capítulo de propiedad intelectual que EEUU está proponiendo en esta negociación y en ese momento cuando vimos las demandas que EEUU tenía en el TPP, analizamos el texto e hicimos un documento”, explica. Agrega que “siete de las provisiones que EEUU quiere en esta materia puede tener un efecto negativo para la salud pública y lo que estamos pidiendo a los países que están negociando, incluido Chile es que protejan la salud pública en la negociación y retiren o rechacen como mínimo las demás de los EEUU que creemos van a tener un impacto negativo en la salud pública”.
Lo que plantea MSF es que se negocie un acuerdo que priorice las necesidades de salud de los pacientes, pero también de las organizaciones no gubernamentales y de los ministerios de salud que normalmente responde a las necesidades de la población. “Tenemos también preocupaciones con algunas secciones del capítulo de inversiones, específicamente en la relación del capítulo de inversiones con propiedad intelectual y después el tercer capítulo de precios y regulaciones farmacéuticas, creemos que se les está solicitando a los países miembros que básicamente limiten su capacidad de regulación de control de precios. Creemos que eso tendrá consecuencias negativas”, concluye.
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