- Mientras dos tercios de la población de América Latina y el Caribe viven en condiciones de pobreza y vulnerabilidad, solo uno en cada tres se “preocupa por el dinero”.
21 de mayo del 2015 – El progreso y el bienestar de la gente implican mucho más que “vivir por debajo o por encima de la línea de pobreza”, según los cerca de 30 especialistas, representantes de gobiernos y de parlamentos de 10 países de la región reunidos hoy en Quito en un seminario sobre el “buen vivir” auspiciado por el Programa de la ONU para el Desarrollo (PNUD) y el Gobierno de Ecuador.
Los análisis, discusiones y ejemplos de cómo los países ya están adoptando nuevas formas de entender y medir el bienestar servirán de insumos para el próximo Informe sobre Desarrollo Humano para América Latina y el Caribe 2016 “Progreso multidimensional: bienestar más allá del ingreso”, del PNUD.. El informe se concentra en lo que esta “detrás” de la salida de la pobreza y del ascenso de clases medias en la región: las “capacidades y activos” de las personas y hogares como el nivel de educación, tener casa propia, acceder a la protección social, y otros “colchones” que eviten que las personas caigan en la pobreza.
“Es crucial redefinir la propia idea del progreso; qué significa vivir bien y cómo la gente ha percibido las trasformaciones en nuestras sociedades ya que el ingreso no lo dice todo,” dijo la Subsecretaria General de la ONU y Directora del PNUD para América Latina y el CaribeJessica Faieta. “También es fundamental centrarse en las exclusiones, discriminaciones y vulnerabilidades que todavía limitan las oportunidades de los y las latinoamericanas: las nuevas políticas públicas tienen que reflejar eso.”
“Cuando hablamos del “buen vivir” pienso en como potenciar las capacidades de todas y todos los ecuatorianos, como mejorar los servicios sociales, ampliando el acceso a los servicios,” dijo Cecilia Vaca Jones, Ministra Coordinadora de Desarrollo Social de Ecuador. ”Y los testimonios mismos de los usuarios nos ayudan a entender y mejor atender a las diversidades a nivel territorial.”
Percepciones del buen vivir – Encuestas realizadas por Gallup entre 2013 y 2014 procesadas y divulgadas hoy por el PNUD dan indicio de la percepción de bienestar entre los latinoamericanos y caribeños.
La mayoría (71%) está tan satisfecha con su nivel de vida y con las cosas que pueden comprar y hacer como los habitantes de la Unión Europea y la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (la OCDE, conocida como el club de los países ricos).
Asimismo las y los latinoamericanos y caribeños son los más satisfechos con sus rutinas: un 49% de personas que declararon “estar fuertemente de acuerdo” con la expresión “te gusta lo que haces de manera cotidiana”, comparados con 38% en América del Norte, 37% en los países nórdicos y 20% en Asia Oriental como última entre todas las regiones.
Además, en América Latina y el Caribe las personas de mayor edad o menor nivel de educación muestran mayores niveles de preocupación, según los resultados de la encuesta. Mientras que el 44% de la población total mostró preocupación, el porcentaje para la población de 50 años o más fue de un 50% y el de las personas con ocho años o menos de educación formal fue de un 49%.
Las percepciones de hombres y mujeres también son distintas. La encuesta reveló que una mayor proporción de las mujeres (46%) que de los hombres (41%) experimentó preocupación, y las mujeres revelaron preocuparse un poco más (33%) que los hombres (29%) por el dinero. Además, más mujeres (27%) que hombres (17%) declararon haber sentido tristeza el día anterior.
Además, alrededor de un tercio (31%) de las y los latinoamericanos y caribeños han experimentado preocupación por el dinero. Sin embargo, mientras menor el ingreso mayor la preocupación por dinero. Las personas que más declararon preocuparse por el dinero según su ingreso (39%) fueron las que conforman al 20% más pobre de la población. Asimismo, el grupo más preocupado por el dinero (35%) tiene entre 30 y 49 años.
“Vemos claramente la importancia de ampliar la mirada más allá del ingreso y el crecimiento económico cuando un tercio de la población de la región dice haber experimentado preocupación por el dinero, a pesar de que dos tercios se encuentren en situación de pobreza y vulnerabilidad (respectivamente, el 25% vive con menos de cuatro dólares diarios y el 38% vive justo por en cima de la línea de pobreza con entre cuatro y 10 dólares diarios, un total de 68% según datos del PNUD),” dijo el economista jefe del PNUD para América Latina y el Caribe George Gray Molina.
“El progreso material y la percepción de cambios en la vida cotidiana no siempre coinciden; por ello, estamos aquí en Quito, escuchando de experiencias de vanguardia sobre nociones alternativas de bienestar, como las de Bolivia y Ecuador.”
21 de mayo del 2015 – El progreso y el bienestar de la gente implican mucho más que “vivir por debajo o por encima de la línea de pobreza”, según los cerca de 30 especialistas, representantes de gobiernos y de parlamentos de 10 países de la región reunidos hoy en Quito en un seminario sobre el “buen vivir” auspiciado por el Programa de la ONU para el Desarrollo (PNUD) y el Gobierno de Ecuador.
Los análisis, discusiones y ejemplos de cómo los países ya están adoptando nuevas formas de entender y medir el bienestar servirán de insumos para el próximo Informe sobre Desarrollo Humano para América Latina y el Caribe 2016 “Progreso multidimensional: bienestar más allá del ingreso”, del PNUD.. El informe se concentra en lo que esta “detrás” de la salida de la pobreza y del ascenso de clases medias en la región: las “capacidades y activos” de las personas y hogares como el nivel de educación, tener casa propia, acceder a la protección social, y otros “colchones” que eviten que las personas caigan en la pobreza.
“Es crucial redefinir la propia idea del progreso; qué significa vivir bien y cómo la gente ha percibido las trasformaciones en nuestras sociedades ya que el ingreso no lo dice todo,” dijo la Subsecretaria General de la ONU y Directora del PNUD para América Latina y el CaribeJessica Faieta. “También es fundamental centrarse en las exclusiones, discriminaciones y vulnerabilidades que todavía limitan las oportunidades de los y las latinoamericanas: las nuevas políticas públicas tienen que reflejar eso.”
“Cuando hablamos del “buen vivir” pienso en como potenciar las capacidades de todas y todos los ecuatorianos, como mejorar los servicios sociales, ampliando el acceso a los servicios,” dijo Cecilia Vaca Jones, Ministra Coordinadora de Desarrollo Social de Ecuador. ”Y los testimonios mismos de los usuarios nos ayudan a entender y mejor atender a las diversidades a nivel territorial.”
Percepciones del buen vivir – Encuestas realizadas por Gallup entre 2013 y 2014 procesadas y divulgadas hoy por el PNUD dan indicio de la percepción de bienestar entre los latinoamericanos y caribeños.
La mayoría (71%) está tan satisfecha con su nivel de vida y con las cosas que pueden comprar y hacer como los habitantes de la Unión Europea y la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (la OCDE, conocida como el club de los países ricos).
Asimismo las y los latinoamericanos y caribeños son los más satisfechos con sus rutinas: un 49% de personas que declararon “estar fuertemente de acuerdo” con la expresión “te gusta lo que haces de manera cotidiana”, comparados con 38% en América del Norte, 37% en los países nórdicos y 20% en Asia Oriental como última entre todas las regiones.
Además, en América Latina y el Caribe las personas de mayor edad o menor nivel de educación muestran mayores niveles de preocupación, según los resultados de la encuesta. Mientras que el 44% de la población total mostró preocupación, el porcentaje para la población de 50 años o más fue de un 50% y el de las personas con ocho años o menos de educación formal fue de un 49%.
Las percepciones de hombres y mujeres también son distintas. La encuesta reveló que una mayor proporción de las mujeres (46%) que de los hombres (41%) experimentó preocupación, y las mujeres revelaron preocuparse un poco más (33%) que los hombres (29%) por el dinero. Además, más mujeres (27%) que hombres (17%) declararon haber sentido tristeza el día anterior.
Además, alrededor de un tercio (31%) de las y los latinoamericanos y caribeños han experimentado preocupación por el dinero. Sin embargo, mientras menor el ingreso mayor la preocupación por dinero. Las personas que más declararon preocuparse por el dinero según su ingreso (39%) fueron las que conforman al 20% más pobre de la población. Asimismo, el grupo más preocupado por el dinero (35%) tiene entre 30 y 49 años.
“Vemos claramente la importancia de ampliar la mirada más allá del ingreso y el crecimiento económico cuando un tercio de la población de la región dice haber experimentado preocupación por el dinero, a pesar de que dos tercios se encuentren en situación de pobreza y vulnerabilidad (respectivamente, el 25% vive con menos de cuatro dólares diarios y el 38% vive justo por en cima de la línea de pobreza con entre cuatro y 10 dólares diarios, un total de 68% según datos del PNUD),” dijo el economista jefe del PNUD para América Latina y el Caribe George Gray Molina.
“El progreso material y la percepción de cambios en la vida cotidiana no siempre coinciden; por ello, estamos aquí en Quito, escuchando de experiencias de vanguardia sobre nociones alternativas de bienestar, como las de Bolivia y Ecuador.”
Compartir esto: