200.000.- PERSONAS … Por una “Buena Educación”
En la introducción de “Hacia una buena Escuela” de David Hopkins. Hace referencia a un trabajo de Amatai Etzioni “The third Way to a Good Society” (la tercera vía hacia una buena sociedad), que le inspiraría un hilo conductor y unificador para sus propuestas en otra de sus obrar “Every School a Great School” (Cada escuela una gran escuela). En la siguiente cita, Etzioni se refiere a la comunidad como el componente estructural necesario para lograr una buena sociedad; el equivalente educacional son las redes.
El principio ético de que las personas deben ser tratadas como propósito en lugar de sólo un medios es algo comúnmente aceptado. Pero goza de menos aceptación la significativa observación sociológica de que es en el seno de las comunidades y no en el ámbito del Estado o del mercado donde este principio mejor se institucionaliza.
Igualmente crucial es el reconocimiento de que sólo en una sociedad en la que nadie es excluido y en la que todos son tratados con el mismo respeto, todas las personas adquieren el status de ser fines en sí mismos y se les permite alcanzar su pleno potencial humano. Más aún, la idea comunitaria central de que tenemos derechos individuales inalienables y responsabilidades sociales los unos con los otros se basa en el mismo principio básico: tenemos derecho a ser tratados como fines en sí mismos y debemos tratar a los demás miembros de nuestra comunidad del mismo modo.
La buena sociedad es aquella que equilibra tres elementos muchas veces parcialmente incompatibles: El Estado, el mercado y la comunidad. Esa es la lógica que subyace en las afirmaciones anteriores. La buena sociedad no pretende borrar estos segmentos sino mantenerlos debidamente nutridos -y contenidos.
Como se ha dicho en paginas precedentes, respecto de lo acontecido con la reforma en los últimos 20 años, en los que,esta no ha dado o rendido los frutos esperados y frente a los hechos de las últimas manifestaciones. Hemos traído la cita anterior. Pues la intuición de que en alguna medida los conceptos propios del mercado, adoptados y entendidos erróneamente en su aplicación en el ámbito de la Escuela han terminado desnaturalizando a la misma.
El principio básico pasado a llevar es el que “las personas deben ser tratadas como propósito en lugar de sólo un medio”. Es así como el niño/alumno/estudiante se convierten en “insumo” y seleccionamos el mejor insumo, para obtener el “mejor producto”. Por doquier se pueden ver distintos ejemplos como se ha desnaturalizado y corrompido cualquier equilibrio razonable en el ámbito de la educación, donde “las personas dejaron de ser un fin, sino solo un medio para obtener el máximo de beneficios”. Todo esto a generado una espiral de abusos, podemos recordar algunos hechos de público conocimiento como:
- Centenas de sostenedores sancionados con actas “C”, que en la práctica implica no pequeñas faltas, sino delitos graves que involucrarían hasta el dolo, actuando con premeditación.
-
Infraestructura que atenta a la dignidad de los niños y jóvenes que deben asistir a estos establecimientos “educacionales”
- La practica habitual en la enseñanza básica/media la exclusión de los niños/jóvenes problemas. Pues son malos insumo.
- Al momento de medir en pruebas SIMCE, el hecho de hacer faltar a los alumnos con desempeño no satisfactorio o que pueden perjudicar la medición para el establecimiento.
- La deficiente evaluación/fiscalización de la correcta y veras confección de los portafolios para “La Evaluación Docente”.
- Universidades que dictan carreras no acreditadas o sin ninguna posibilidad de desarrollo o práctica profesional.
- Instituciones de educación superior que no cuentan con los recursos necesarios para impartir en forma adecuada las carreras que ofrecen.
- Sociedades Educacionales sin fines de lucro, que son fachadas para las inmobiliarias de los mismos dueños o directores de la primeras, por donde se evacuan los potenciales excedentes que podrían financiar el desarrollo de las mismas.
Estos son solo algunos de los síntomas, de la des naturalización en que el elemento medular sería la perdida de “la razón de ser en si misma”, de la escuela en particular y de cualquier instituciones de Educación en nuestro país. La consideración de los niños/jóvenes como medios para maximizar nuestros Beneficios/Utilidades por parte de los Docentes, Directivos, Sostenedores, Corporaciones, Sociedades y de mas actores involucrados se ha constituido en una falta oprobiosa que debe ser corregida. No puede ser, que los niños/jóvenes sientan que son mirados como “signos pesos caminantes”, como decía un joven en la emisión de un programa en la televisión publica, el día martes 28 de junio pasado.
De ello la necesidad urgente de reforzar el “empoderamiento” de las comunidades y de los liderazgos claros y sanos en torno al principio básico que “Los niños/jóvenes son personas con un fin en si mismos y no solo un medio”.
Hoy por otros motivos nos visita mi Tía Isabel … Ella profesora Normalista que fue mi Primera Maestra. En ella quiero agradecer a todos esos maestros de vocación que tuve en mi preparación en la escuela / liceo / Universidad . Esos maestros con Vocación y que denodadamente se entregaban a su tarea de dar luz a sus niños, a los que nos veían como personas como un fin en si mismos y no como medios.
Publicada Originalmente en Facebook 1 de Julio 2011
200.000.- PERSONAS … Por una “Buena Educación”
En la introducción de “Hacia una buena Escuela” de David Hopkins. Hace referencia a un trabajo de Amatai Etzioni “The third Way to a Good Society” (la tercera vía hacia una buena sociedad), que le inspiraría un hilo conductor y unificador para sus propuestas en otra de sus obrar “Every School a Great School” (Cada escuela una gran escuela). En la siguiente cita, Etzioni se refiere a la comunidad como el componente estructural necesario para lograr una buena sociedad; el equivalente educacional son las redes.
El principio ético de que las personas deben ser tratadas como propósito en lugar de sólo un medios es algo comúnmente aceptado. Pero goza de menos aceptación la significativa observación sociológica de que es en el seno de las comunidades y no en el ámbito del Estado o del mercado donde este principio mejor se institucionaliza.
Igualmente crucial es el reconocimiento de que sólo en una sociedad en la que nadie es excluido y en la que todos son tratados con el mismo respeto, todas las personas adquieren el status de ser fines en sí mismos y se les permite alcanzar su pleno potencial humano. Más aún, la idea comunitaria central de que tenemos derechos individuales inalienables y responsabilidades sociales los unos con los otros se basa en el mismo principio básico: tenemos derecho a ser tratados como fines en sí mismos y debemos tratar a los demás miembros de nuestra comunidad del mismo modo.
La buena sociedad es aquella que equilibra tres elementos muchas veces parcialmente incompatibles: El Estado, el mercado y la comunidad. Esa es la lógica que subyace en las afirmaciones anteriores. La buena sociedad no pretende borrar estos segmentos sino mantenerlos debidamente nutridos -y contenidos.
Como se ha dicho en paginas precedentes, respecto de lo acontecido con la reforma en los últimos 20 años, en los que,esta no ha dado o rendido los frutos esperados y frente a los hechos de las últimas manifestaciones. Hemos traído la cita anterior. Pues la intuición de que en alguna medida los conceptos propios del mercado, adoptados y entendidos erróneamente en su aplicación en el ámbito de la Escuela han terminado desnaturalizando a la misma.
El principio básico pasado a llevar es el que “las personas deben ser tratadas como propósito en lugar de sólo un medio”. Es así como el niño/alumno/estudiante se convierten en “insumo” y seleccionamos el mejor insumo, para obtener el “mejor producto”. Por doquier se pueden ver distintos ejemplos como se ha desnaturalizado y corrompido cualquier equilibrio razonable en el ámbito de la educación, donde “las personas dejaron de ser un fin, sino solo un medio para obtener el máximo de beneficios”. Todo esto a generado una espiral de abusos, podemos recordar algunos hechos de público conocimiento como:
Estos son solo algunos de los síntomas, de la des naturalización en que el elemento medular sería la perdida de “la razón de ser en si misma”, de la escuela en particular y de cualquier instituciones de Educación en nuestro país. La consideración de los niños/jóvenes como medios para maximizar nuestros Beneficios/Utilidades por parte de los Docentes, Directivos, Sostenedores, Corporaciones, Sociedades y de mas actores involucrados se ha constituido en una falta oprobiosa que debe ser corregida. No puede ser, que los niños/jóvenes sientan que son mirados como “signos pesos caminantes”, como decía un joven en la emisión de un programa en la televisión publica, el día martes 28 de junio pasado.
De ello la necesidad urgente de reforzar el “empoderamiento” de las comunidades y de los liderazgos claros y sanos en torno al principio básico que “Los niños/jóvenes son personas con un fin en si mismos y no solo un medio”.
Hoy por otros motivos nos visita mi Tía Isabel … Ella profesora Normalista que fue mi Primera Maestra. En ella quiero agradecer a todos esos maestros de vocación que tuve en mi preparación en la escuela / liceo / Universidad . Esos maestros con Vocación y que denodadamente se entregaban a su tarea de dar luz a sus niños, a los que nos veían como personas como un fin en si mismos y no como medios.
Publicada Originalmente en Facebook 1 de Julio 2011
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