Aunque la seguridad de las redes Tor por ahora se han demostrado que es eficaz, tenemos que tener en cuenta que se trata de la comunicación entre servidor y tú PC, ya es cosa del administrado de la web en asegurar todos sus datos. De no hacerlo correctamente, una base de datos alojada bajo una red Tor no es más segura que una alojada en la WWW.
El FBI, mientras investigaba un caso relacionado con la pornografía infantil, se hizo con los servidores de Freedom Hosting, famoso por almacenar algunas webs con este tipo de contenido y que ya había sido atacado por miembros de Anonymous por este mismo motivo. Ha resultado que el servicio de correo electrónico anónimo TorMail estaba alojado en este centro de datos y ahora el FBI tiene una parte desconocida de su base de datos.
Un nuevo caso de venta de datos de tarjetas de crédito estaba usando un correo electrónico bajo el @tormail.net, por lo que el FBI ha pedido permiso para acceder a la copia que tienen de su base de datos, de la cual por ahora no se sabe su alcance ni tamaño, pero si que se ha logrado copiar gracias amalware que ha ido copiando los datos a los propios servidores del FBI.
El uso de este tipo de tácticas por ahora es conocida por las revelaciones de laNSA, entre cuyas prácticas está la posibilidad de instalar malware para acceder a datos de PCs de forma remota.
Esta práctica está permitiendo al FBI cazar hackers, lo cual abre una nueva brecha entre lo que puede, debe y los medios que tiene una agencia de seguridad como el FBI. ¿El uso de malware puede usarse de la misma forma que hasta ahora se ha usado la grabación de llamadas?
Link: Wired
Aunque la seguridad de las redes Tor por ahora se han demostrado que es eficaz, tenemos que tener en cuenta que se trata de la comunicación entre servidor y tú PC, ya es cosa del administrado de la web en asegurar todos sus datos. De no hacerlo correctamente, una base de datos alojada bajo una red Tor no es más segura que una alojada en la WWW.
El FBI, mientras investigaba un caso relacionado con la pornografía infantil, se hizo con los servidores de Freedom Hosting, famoso por almacenar algunas webs con este tipo de contenido y que ya había sido atacado por miembros de Anonymous por este mismo motivo. Ha resultado que el servicio de correo electrónico anónimo TorMail estaba alojado en este centro de datos y ahora el FBI tiene una parte desconocida de su base de datos.
Un nuevo caso de venta de datos de tarjetas de crédito estaba usando un correo electrónico bajo el @tormail.net, por lo que el FBI ha pedido permiso para acceder a la copia que tienen de su base de datos, de la cual por ahora no se sabe su alcance ni tamaño, pero si que se ha logrado copiar gracias amalware que ha ido copiando los datos a los propios servidores del FBI.
El uso de este tipo de tácticas por ahora es conocida por las revelaciones de laNSA, entre cuyas prácticas está la posibilidad de instalar malware para acceder a datos de PCs de forma remota.
Esta práctica está permitiendo al FBI cazar hackers, lo cual abre una nueva brecha entre lo que puede, debe y los medios que tiene una agencia de seguridad como el FBI. ¿El uso de malware puede usarse de la misma forma que hasta ahora se ha usado la grabación de llamadas?
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